Esta semana es el Miércoles de Ceniza, donde el sentimiento cofradiero incia su cuenta atrás y comienza la Cuaresma (tiempo en el que nos prepararemos para la Pascua de Resurreción, tras los misterios de la Pasión y Muerte de Ntro. Señor Jesuscristo, donde se nos invita especialmente a la práctica del sacramento del perdón o penitencia).
Es día de ayuno y abstinencia (como el Viernes Santo) y la Liturgia nos presenta el rito, característico, de la imposición de la ceniza. En la Misa se bendecirá la ceniza, hecha de los ramos de olivo y palmas, bendecidos el año precedente. El sacerdote nos la impondrá a los presentes en la cabeza o la frente con cualquiera de estas dos fórmulas:
Es día de ayuno y abstinencia (como el Viernes Santo) y la Liturgia nos presenta el rito, característico, de la imposición de la ceniza. En la Misa se bendecirá la ceniza, hecha de los ramos de olivo y palmas, bendecidos el año precedente. El sacerdote nos la impondrá a los presentes en la cabeza o la frente con cualquiera de estas dos fórmulas:
“Convertíos y creed en el Evangelio”
o bien
“Acuérdate de que eres polvo y en polvo te convertirás”
o bien
“Acuérdate de que eres polvo y en polvo te convertirás”
El Miércoles de Ceniza es un llamamiento a la conversión individual, a nivel familiar, en el grupo de amigos y como comunidad cristiana o Iglesia y como no, en nuestra Cofradía o Hermandad como parte integrante de aquella.
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